En el Salón Rojo, con la presencia del Intendente Guillermo Caraballo, se llevó a cabo este 7 de febrero la presentación del proyecto “Crystal Lagoon”, que prevé la generación de una laguna artificial en la zona de Ruta 3 y el arroyo San Francisco. Tras un fluido proceso conjunto con la Intendencia para la obtención de las correspondientes habilitaciones, el grupo inversor “La Tahona” prevé la ejecución de un proyecto que al cabo de 15 años invertirá alrededor de 60 millones de dólares.

Proceso conjunto

Guillermo Caraballo informó que desde 2019 la Intendencia viene manteniendo contactos con el grupo inversor, cuyo proyecto, vinculado primordialmente al sector turístico, consiste en la generación de una laguna artificial de acceso público y privado, en tanto se irá ejecutando en varias etapas a lo largo de los próximos 15 años.

“Antes de fin de año la propuesta fue presentada formalmente a la Intendencia para obtener su viabilidad”, sostuvo el Intendente, que estuvo acompañado por la directora general de Promoción y Desarrollo, María José Mannise.

Los inversores fueron convocados por la Intendencia y, tras un breve proceso, obtuvieron las correspondientes habilitaciones para el comienzo de las obras.

El proceso también involucró a organismos nacionales como los ministerios de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, el de Transporte y Obras Públicas y también el de Economía y Finanzas.

“El Gobierno Departamental está tratando de colaborar en lo que esté dentro de sus posibilidades para que en el corto plazo este proyecto comience a ser una realidad”, afirmó el Intendente.

Unos 60 millones de dólares

Matías Zanoniani, del grupo inversor, destacó “el trabajo conjunto” que se desarrolla con la Intendencia y que ya permitió el desarrollo de un proyecto de perfil netamente inmobiliario (en la zona del Paysandú Golf Club) y ahora otro de carácter “más turístico”, que si bien posee un componente inmobiliario se centrará en la generación de una laguna de 20.000 metros cuadrados “con playa pública y privada” de 7.000 metros, además de 400 lotes de residencia y turismo, con hotelería, un club, restorán y salones de eventos.

Ignacio Añón informó que, en aproximadamente 15 años, el complejo, denominado “San Francisco”, se estructurará en base a una inversión cercana a los 60 millones de dólares, estimándose la habilitación de la laguna en aproximadamente un año y medio, tras lo cual se desarrollará el proceso de generación de las edificaciones circundantes.

“Sin el apoyo y ese diálogo fluido para poder avanzar con las viabilidades, el avance de la posibilidad de la laguna hubiese sido imposible”, sostuvo el empresario en alusión al proceso que se desarrolló junto a la Intendencia.

Los inversores estiman que, dadas las características del proyecto y la ubicación estratégica del complejo, el flujo hacia Paysandú se incrementará en alrededor de 100.000 turistas, en tanto habrá un positivo impacto en el sector comercial y en el mercado laboral.