La Intendencia, junto a otras instituciones que integran el Comité Departamental de Emergencias, realiza monitoreos en la zona sureste de la ciudad ante la detección en este sector de un nuevo caso de leishmaniasis canina, en este caso en otro perro traído desde la ciudad de Salto. Se exhorta a la población a limpiar predios para evitar la proliferación del vector y evitar el trasiego de perros desde y hacia las zonas con casos detectados, como Salto y Bella Unión.

Nuevo caso confirmado

Esta tarde, en el salón comunal del barrio IC 19, la directora general interina de Servicios, Olga Rodríguez, actualmente al frente del Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed), encabezó una charla informativa acompañada por el director departamental de Salud, Juan Gorosterrazú.

Rodríguez indicó que el Comité Departamental de Emergencias está trabajando en la zona del barrio IC 19, ubicado en las inmediaciones de Avenida Soriano y Felipe Argentó, dado que en este sector de la ciudad se detectó en las últimas horas un nuevo caso de leishmaniasis canina, nuevamente en un perro que llegó a nuestra ciudad desde la ciudad de Salto.

“Las instituciones que componen el Comité Departamental de Emergencias están apoyando las tareas de campo que no solamente hacen al diagnóstico en los animales, sino sobre todo en lo referente al control ambiental, es decir la limpieza de los espacios públicos”, informó.

La detección de un nuevo caso –indicó- pone en alerta a la comunidad de Paysandú, dado que se trata de “una enfermedad que viene siendo recurrente”, aunque hasta el momento se ha presentado únicamente en animales.

Es necesario el compromiso de la población

Si bien la leishmaniasis es una zoonosis que requiere de un vector (una variedad de mosca hematófaga) para su dispersión, también puede transmitirse por vía sexual o directamente de madre a cachorro.

Asimismo, por acción del vector, puede transmitirse al ser humano, pudiendo causar sintomatología grave.

“Convocamos a todos los vecinos a hacerse eco de esta problemática, asumir la responsabilidad y adoptar todas aquellas medidas que hacen al control de la misma: desde la tenencia responsable de los animales, con todos los cuidados que ello implica; el cuidado de los fondos de las casas, evitar la acumulación de materia orgánica, de residuos, de lugares donde haya humedad donde puede proliferar el vector”, recomendó Rodríguez.

Se desplegó un protocolo de acción

Gorosterrazú en tanto, confirmó que, tras detectarse un caso en Paysandú la semana pasada, anoche se confirmó un nuevo diagnóstico, en este caso en otro perro llegado a nuestra ciudad desde Salto.

Recordó que desde 2015 vienen realizándose diversas actividades de “búsqueda activa” del vector y de animales con síntomas de la enfermedad.

Una vez detectado el primer caso se desplegó un protocolo de acción, con intervenciones (análisis a los perros) en la manzana de edificios donde se registró, así como en las nueve circundantes, donde se colocaron trampas en procura de detectar al vector.

El director departamental de salud informó que este operativo, del que también participa la cooperativa social Coseden del MSP e instituciones integrantes del Comité de Emergencias, se amplió en las últimas horas.

Aseguró que “un aspecto central” para evitar la propagación de la enfermedad es “no traer ni llevar perros” hacia las zonas del país donde se ha detectado, como Salto y Bella Unión, así como hacia la República Argentina.

“En Paysandú por ahora no tenemos el vector”, confirmó Gorosterrazú e informó que los últimos estudios al respecto han vuelto a resultar negativos.

El RK39 es el análisis que se realiza a los animales para detectar la enfermedad, en tanto el uso de collares específicos para repeler al vector es una de las medidas profilácticas que pueden adoptarse, además de la tenencia responsable de animales y la limpieza periódica de predios.