pueblo gallinal 007Este sábado quedará oficialmente inaugurada la obra de pavimentación de los quince kilómetros de camino que unen Ruta 26 con pueblo Gallinal, una obra reclamada desde hace décadas, fundamental para la salida de la producción y para la conectividad de centenares de familias de la zona. Se trata de un proyecto ejecutado en su totalidad con mano de obra municipal, con una inversión cercana a los 44 millones de pesos.

“Obra emblemática”

A pocas horas de la inauguración, el director General de Obras, Gonzalo David de Lima, aseguró que se trata de “una obra emblemática, debido a que ha tenido gran demanda a través del tiempo” y que “esta administración la tomó con seriedad y responsabilidad”.

Informó que además de los 1500 sanduceros que viven en la zona y se benefician directamente, este proyecto “tiene una zona de influencia de unas 200.000 hectáreas directamente vinculadas a este conector primario”. El camino es muy utilizado para el traslado de la producción agrícola, ganadera y forestal, al tiempo que brinda conectividad a varias localidades.

Un tramo de intenso tránsito

El proyecto prevé la conformación total del camino, llevándolo a un ancho de 7 metros, desde Ruta 26 hasta Cerro Chato, en un total de 20 kilómetros; con aplicación de tratamiento bituminoso doble, con sellado, en los 15 kilómetros hasta Gallinal, además del emplazamiento de señalización de acuerdo a la normativa vigente y acorde a la geometría del trazado.

“Un conteo primario del tránsito señala que circulan por allí un promedio de 40 camiones diarios y a veces más, cuando se solapan la salida de las producciones”, indicó y añadió que unas 250 personas utilizan diariamente este tramo, lo que se suma a “las poblaciones que se trasladan en periodos de zafra” fundamentalmente citrícola y forestal.

“Un desafío a nivel técnico y ejecutivo”

El proyecto –añadió- “fue un gran desafío a nivel técnico y a nivel ejecutivo” para la Intendencia, además de “una inversión importantísima, en el entorno de los 44 millones de pesos”, que está “totalmente fundamentada” en virtud del intenso uso que se le da a este camino.

“El nivel de exigencia fue equiparable a una ruta nacional, por el nivel de tráfico, por el diseño del proyecto; por el diseño de la capacidad portante del camino”, subrayó.

El director de Obras recordó que lo primordial en el proyecto, para garantizar la durabilidad y óptimo comportamiento ante el intenso tránsito, fue el “gran trabajo de movimiento de suelos, de sub base, base y compactación, para alcanzar los niveles adecuados de resistencia”.

Un proyecto descentralizador

David de Lima expresó el beneplácito que representa para la Administración que conduce Caraballo la concreción de este proyecto, dado que “da solución a una demanda de larga data y garantiza no solamente la salida de la producción, sino la conectividad de todos los centros poblados de la zona”.

Además, su ejecución constituye “una forma de descentralizar los recursos” y encontrar al Estado “invirtiendo en todo su territorio, con racionalidad acorde”.

El desarrollo de los trabajos requirió el traslado de cuadrillas y maquinaria a 68 kilómetros de la capital departamental, lo que significó –afirmó David de Lima- “un gran desafío para la Dirección de Obras”.

“Tuvimos destinados equipos viales completos a nivel de camiones, motoniveladoras, compactadoras y lo que es la parte de extracción de áridos. De forma permanente para la conformación del camino”, indicó.

 

Submit to FacebookSubmit to Google PlusSubmit to TwitterSubmit to LinkedIn