La Intendencia comenzó la ejecución de la última etapa de las obras de saneamiento en Termas de Almirón, que permitirán la conexión de los moteles municipales y el Hotel Salinas del Almirón. Los trabajos constituyen el cumplimiento de un compromiso asumido a comienzos de la actual Administración y además reportarán un importante ahorro dado que ahora resulta necesario contratar barométricas periódicamente.

Tras contratiempos por el terreno, se retomaron los trabajos

Tras la finalización de la primera etapa de la obra, pospuesta por dos modificaciones del trazado vinculadas a las características del terreno, la Intendencia retomó los trabajos de extensión de red de saneamiento en Termas de Almirón tal como se anunciara en los últimos días.

“Se reemprendieron las obras. Esto ya estaba previsto y comprometido”, informó el director de Turismo de la Intendencia, Alejandro Leites.

Indicó que del trayecto total de la obra ya se completó prácticamente la mitad y en unos quince días se estará arribando al sector donde estarán las cámaras de procesamiento.

“Ahí quedaría terminado lo que sería el ramal principal del saneamiento”, adelantó.

A este ramal principal quedarán conectados el Hotel Salinas del Almirón y los diez moteles de la Intendencia.

Compromiso de gestión

La concreción de obras de saneamiento en Termas de Almirón constituye –subrayó Leites- un compromiso asumido por la Intendencia al comienzo de la actual administración, cuando aún no estaba finalizada la construcción del hotel, cuyos inversionistas enfrentaban esta problemática.

“Llegamos a un acuerdo de realizar en forma compartida este primer tramo de saneamiento; ellos aportaron los materiales y la Intendencia la mano de obra”, afirmó.

Algunas demoras en la concreción de esta primera etapa obedecieron a que los primeros dos trazados proyectados debieron ser modificados por las características del terreno, lo que implicó nuevo cálculo de niveles y cateo de suelos.

Impacto ambiental y ahorro de recursos públicos

La próxima etapa del proyecto, que comenzará en 2018 tras la licencia de la construcción, prevé la generación de un ramal secundario al que se conectarán las viviendas particulares, fase en la que está previsto un aporte de los vecinos.

Las obras generan “un aporte en calidad” al centro termal, expresó Leites, por cuanto subsanan inconvenientes como los registrados recientemente, en tanto “generan un ahorro muy importante a la Administración”, ya que dos veces al mes debía contratar servicio de barométrica para el vaciado de cámaras sépticas y pozos negros.